Hoy en día, una mujer de 51 años como Romina Manguel es joven, y si desea tener un novio 21 años menor, ¿a quién le importa? Mientras la relación sea sincera y llena de amor, ¿por qué criticar? Al periodismo de espectáculos que se entromete en la vida privada para que la gente juzgue si está bien o mal, ¿no es hora de dejar de lado el morboso interés?
A aquellos que consumen este tipo de noticias para entretenerse u ofenderse criticando la vida ajena, ¿no les parece que es hora de reflexionar? ¿Qué saben sobre la intimidad de Romina y Matías? ¿Acaso su relación debe ser sometida a escrutinio público?
Muchas veces, incluso las mujeres más liberales tienen fantasías y las concretan, pero las viven con culpa. ¿Por qué? ¿Por el qué dirán? ¿Por el mandato familiar que impone normas y expectativas? Romina se casó por templo, pero ¿no es hora de dejar atrás esas cadenas sociales?
Si Leonardo DiCaprio, a sus 50 años, sale con una chica de 25, ¿por qué se considera aceptable? ¿Y si nuestro abuelo llevaba 20 años a nuestra abuela, no era también aceptable en otra época? La doble moral sigue vigente.
No conozco a Matías, y es probable que con el tiempo la diferencia de edad pueda afectar la relación. Pero, con la mano en el corazón, ¿cuál fue su relación de pareja más duradera? La mía, 22 años. Sin embargo, hoy en día las parejas duran menos, porque cuando están mal, se pelean. Así que la diferencia de edad podría ser una causa de ruptura en el futuro, o si Matías quisiera tener hijos a los 30. Pero para eso falta. Disfruten mientras puedan.
Juan Botana es escritor y licenciado en Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Buenos Aires. Es autor de los libros Recovecos, Toda la voz de América en mi piel, Amores truncos y Sin ojos que los miren.